Significado de Maranatha

La palabra "Maranata" (maravn-ajqav), corresponde a la trascripción griega de una expresión de origen arameo, compuesta por dos términos, que significa "El Señor viene".

Esta misma expresión se encuentra con algunas variaciones, como "Maranatha", "Marana-ta", o “Maran-ata”, que significan prácticamente lo mismo.

Esta palabra se encuentra en la Biblia, en el pasaje de 1º Corintios 16:22, en donde se cita tal cual en las versiones más antiguas, como en el caso de la RV 1909 o la versión inglesa KJ que tienen impresa la palabra “Maranatha”:

“El que no amare al Señor Jesucristo, sea anatema. Maranatha.” (1 Corintios 16:22, RV1909)


En versiones posteriores, la palabra aludida aparece traducida al castellano, de manera que en las versiones RV 1960 y 1995 aparece como “El Señor viene”.

“El que no amare al Señor Jesucristo, sea anatema. El Señor viene.” (1 Corintios 16:22, RV1960)


Referente a la composición de ésta palabra, el diccionario VINE (en su versión electrónica para E-Sword) comenta:

“La primera parte, que finaliza en «n», significa «Señor»; en cuanto a la segunda parte, los «Padres» la consideraban como un tiempo pretérito, «ha venido». Los modernos expositores la toman como equivalente a un presente, «viene», o futuro, «vendrá».
Ciertos eruditos en arameo consideran que la última parte consiste en «tha», e interpretan la frase como una exclamación, «Ven, nuestro Señor», o «Oh, ven Señor».
Sin embargo, el carácter del contexto indica que el apóstol está haciendo una declaración en lugar de expresar un deseo o de pronunciar una oración.”


Referente al motivo de su uso en los primeros cristianos, el citado diccionario dice:

“En cuanto a la razón de por qué se usaba esta expresión, lo más probable es que fuera una expresión corriente entre los cristianos primitivos, que incluía la consumación de sus deseos. «Al principio el título Marana o Maran, utilizado al dirigirse a Cristo y al referirse a Él, no era otra cosa que la respetuosa designación del Maestro por parte de los discípulos».”